«Enseñanos a calcular nuestros años, para que adquiramos un corazón sensato…» (Salmo 90, 12)
Hoy en la Fiesta de Santo Tomás de Aquino, pedimos al Señor el Don de la Sabiduría con este fragmento de un Himno de la Liturgia de las Horas:
«¡Hontanares de Dios!,
¡hombres del Evangelio!,
¡humildes inteligencias luminosas!,
¡grandes hombres de barro tierno!
¡Hombres de Cristo, Maestros de la Iglesia!,…
Dadnos una vida de rodillas
ante el misterio,
una visión de este mundo
y una esperanza de cielo.
Padre, te pedimos para la Iglesia
la ciencia de estos maestros» Amén.
«La sabiduría que viene de arriba ente todo es pura y, además, es amante de la paz, comprensiva, dócil, llena de misericordia y buenas obras, constante, sincera. Los que procuran la paz están sembrando la paz; y su fruto es la justicia» (Santiago 3, 17-18)
Que tu Espíritu nos de esa Sabiduría de los Pobres… Amén.