Citas
Audiencia Papal Miércoles 16 de febrero 2022
Tu crecimiento personal y espiritual con San José. 12
Con San José aprendemos la sabiduría de vivir con atención el momento presente: el Aquí y el Ahora llenándolo de vida y amor, haciendo lo que hay que hacer de manera extraordinaria aunque sea algo pequeño o insignificante a los ojos de los demás.
«Transformación: Arcángel Gabriel» en YouTube
Lili Cifuentes, Comunión del alma, nos explica brevemente en este vídeo la acción amorosa de Dios por medio del Árcangel Gabriel y de todos sus ángeles.
La Virgen María y San José son el mejor ejemplo de esa acción transformadora del amor de Dios por medio de sus Santos Ángeles.
Aprendamos de ellos a dejarnos visitar por los Ángeles Dios y ponernos en camino.
https://youtu.be/UIhcPbHWxo8
La Presentación del Señor
Ayer 02 de febrero de 2022 en la iglesia celebrabamos la Fiesta de la Presentacion del niño Jesús en el Templo de Jerusalén. María y José, cumplian así con el deber y la tradición de ofrecier al hijo primogenito al Señor. Pero, el Señor mismo, quizo darle a este momento un signidicado nuevo, pues no se presentaba a Dios un niño más, Jesús, es el mismo Hijo de Dios hecho carne, hecho un ser humano como nosotros.
Jesús, es la luz del mundo y María y José nos han dado esa Luz que ilumina a toda mujer y hombre que viene a este mundo. Por eso esta fiesta también se conoce como la «Candelaria», la Luz que se ofrece al mundo por manos de María y de José.
También en este dia celebramos el don de la vida consagrada. Agradezcamos a Dios por el regalo de tanots hermanos y hermanas que a lo largo del mundo consagran su vida Dios en favor de los hermanos y que cada día renuevan su entrega.
¡Pongámonos en manos de María y José para que como a Jesús presenten nuestra vida a Dios allí donde falte la luz de su Amor Nuevo!
Primer Dolor y Gozo de San José – Año 2022
Siete Domingos de San José .
Los siete dolores y gozos de San José.
Un año más damos inicio a los «Siete domingos a San José» en los que contemplamos los siete dolores y gozos de San José vividos al lado de Jesús y de María. Es una devoción muy antigua que nos ayuda a conocer el amor con que José amó a Jesús y María, un amor cotidiano entrelazado en medio de los dolores y gozos de cada día, y que nos puede ayudar a vivir con esperanza nuestros dolores y con agradecimiento nuestros gozos.
San José, prometió conceder lo que se le pida, a todo que al contemple sus siete dolores y gozos y reze siete Padre Nuestro y siete Ave María. ¿Estás pasando por un momento difícil en tu vida o en tu familia? ¿Nada te llena y no sabes por dónde orientar tu vida? ¿No sabes dar un sentido a tu sufrimiento y soledad? Te invitamos a orar durante 7 domingos los Dolores y Gozos de San José y le pidas aquello que necesitas en tu vida, ya sea material o espiritual.
Este año, nos ayudará a orar con los Siete Dolores y Gozos de San José, Liliana Cifuentes, creadora del Proyecto: «Comunión del Alma. Comunión de Almas». Deseamos que durante estos siete domingos hasta la Fiesta de la Solemnidad de San José nos ayuden a crecer personalmente y espiritualmente como personas y tengamos la experiencia que tuvo Santa Teresa de Jesús con respecto a San José:
”No me acuerdo hasta ahora haberle suplicado cosa que la haya dejado de hacer… A otros santos, parece les dio el Señor gracia para socorrer en una necesidad; a este glorioso Santo tengo experiencia que socorre en todas”.
(Santa Teresa de Jesús)
¡San José: Llévanos al Padre! 15
“Padre en la acogida”
“José acogió a María sin poner condiciones previas. Confió en las palabras del ángel. «La nobleza de su corazón le hace supeditar a la caridad lo aprendido por ley; y hoy, en este mundo donde la violencia psicológica, verbal y física sobre la mujer es patente, José se presenta como figura de varón respetuoso, delicado que, aun no teniendo toda la información, se decide por la fama, dignidad y vida de María. Y, en su duda de cómo hacer lo mejor, Dios lo ayudó a optar iluminando su juicio» [18]” (Carta Apostólica Patris corde, 4)
Al acoger a María, José está acogiendo también a Jesús. Contemplemos la grandeza del corazón de José que sin comprender todo el misterio de la maternidad de María, la acoge en su corazón con la ayuda de Dios por medio del mensaje que le transmitió el ángel en sus sueños.
¡Pasa a la @cción!
Demos el paso de acoger a las personas que amamos, como dadas por Dios para que las cuidemos y acompañemos. Él confía en que como San José les amamos y les ayudemos a crecer cada día.
¡San José: Llévanos al Padre! 14
“Padre en la obediencia” 5
“Todos estos acontecimientos muestran que José «ha sido llamado por Dios para servir directamente a la persona y a la misión de Jesús mediante el ejercicio de su paternidad; de este modo él coopera en la plenitud de los tiempos en el gran misterio de la redención y es verdaderamente “ministro de la salvación”»[17]” (Carta Apostólica Patris corde, 3)
La obediencia de San José es grande en cuanto es por y para la persona y misión por la que Jesús vino al mundo y se hizo hombre.
La obediencia cristiana no son actos puntuales, al contrario, son parte de la llamada de Dios y dentro de su plan de salvación. La obediencia es escucha a la voz de Dios con la que él va tejiendo esa historia de salvación personal de cada uno de nosotros y del mundo entero.
¡Pasa a la @cción!
Vivamos nuestras responsabilidades cotidianas fuera de la rutina, dándoles el horizonte de que son actos de amor a Dios y los hermanos, es decir, obediencia a Dios Padre como la vivió San José.
¡San José: Llévanos al Padre! 13
«Padre en la obediencia» 4
José, en su papel de cabeza de familia, enseñó a Jesús a ser sumiso a sus padres, según el mandamiento de Dios (cf. Ex 20,12).
En la vida oculta de Nazaret, bajo la guía de José, Jesús aprendió a hacer la voluntad del Padre. Dicha voluntad se transformó en su alimento diario (cf. Jn 4,34). Incluso en el momento más difícil de su vida, que fue en Getsemaní, prefirió hacer la voluntad del Padre y no la suya propia[16] y se hizo «obediente hasta la muerte […] de cruz» (Flp 2,8). Por ello, el autor de la Carta a los Hebreos concluye que Jesús «aprendió sufriendo a obedecer» (5,8).
(Carta Apostólica Patris corde, 3)
Con San José aprendemos que no hay mejor manera de educar que el ejemplo. José vivió diariamente en esa obediencia activa a Dios. Jesús aprendió a obedecer a Dios, obedeciendo a José y a María.
¡Pasa a la @cción!
De María y José aprendamos que la mejor manera de educar y de influir positivamente en el crecimiento personal y espiritual de los demás, es el ejemplo y el testimonio de vida.
Oración de la mañana…
Esperamos que te ayude esta súplica para la oración de hoy…