Ayer terminaba el Tiempo litúrgico de la Navidad. Hoy damos inicio al Tiempo Ordinario, al tiempo de todos los días, a lo cotidiano…
Al igual que a María y José, Dios nos llama a seguirle y darle así un objetivo integrador a nuestras vidas, es decir, un porque que unifica y enfoca todo nuestro ser: Mente, corazón y fuerzas.
María y José recibió cada uno esa llamada que les unió en matrimonio y en torno a cuidar a Jesús y al mismo tiempo ser sus seguidores.
Leamos el Evangelio de hoy y preguntémonos: ¿Tengo un objetivo grande en la vida que enfoque todo lo que soy?