«Nacimos para Semilla…»
Una semilla, pequeña, diminuta e insignificante puede parecer nuestra vida no solo en el planeta Tierra sino en todo el Universo.
Pero como toda semilla lleva dentro un potencial enorme e inimaginado que se muestra solo cuando se siembra, se cuida y brota de ella una Vida Nueva, Grande y Superior, así también puede ser nuestra vida.
Leamos desde la clave de la Semilla está Parábola del Sembrador que un día pronunció Jesús:
¿La Semilla de tu vida se ha sembrado en tierra buena?
¿Estás dando un buen fruto?
La Esperanza no falla…
Guiados por el Espíritu…
Antes de cerrar los ojos…
«Mi Gracia te basta»…
Hoy celebramos la Conversión del Apóstol Pablo. La gracia de Dios y su misericordia lograron que Pablo pasará de su individualismo a la Comunión, a ser uno con Dios y los demás.
Nos hemos acostumbrado en la vida a ser individualistas, a no necesitar de nadie… Y es precisamente esto lo que nos empobrece y hace más debiles…
La gracia de Dios nos basta para vencer nuestra debilidad y flaquezas. Pero Dios quiere que su gracia la recibamos y la activemos en comunidad, con lo otros. Su gracia es personal y compartida.
Todo lo puedo en Él…
Si aceptamos nuestras debilidades (nos alegramos en ellas) no es por la debilidad en en sí misma o porque nos resignemos a ser debiles, sino porque superamos nuestras debilidades con la gracia y el amor de Dios.
Negar, rechazar o sucumbir simplemente ante nuestras debilidades no es el camino para superarlas. Ni es el camino nuestra propia fuerza de voluntad sola…
El camino que no enseña nuestra fe con el ejemplo de tantas mujeres y hombres creyentes a lo largo de la historia es el de apoyarnos en la Fuerza de Dios, pues con Él lo podemos todo… Como nos enseña el Apóstol Pablo. Lo
¿Cómo gestionas tú debilidad?
¿La niegas, la ocultas o sin mas te resignas a vivir así?
¿Aprendes a sacar fuerzas de esa debilidad como el Apóstol Pablo?
¡Me alegro en mi debilidad!
«Detrás de cada debilidad hay una gran FORTALEZA»
¡DESCÚBRELA!
Continuando con el tema de ayer os proponemos meditar estás palabras del Apóstol San Pablo:
La debilidad, fruto de nuestra condición humana, en Dios es posibilidad. La debilidad vivida sin Dios es perdida y frustración de nuestra vida.
Nuestra debilidad es nuestra fortaleza…
Según la forma de pensar de este mundo la debilidad es debilidad, algo negativo a evitar y ocultar a los demás aunque lo seamos…
Pero desde la forma de pensar de Jesús la debilidad nos recuerda que somos humanos, que no somos dioses o superhéroes…
La lectura de hoy nos ayuda a vivir reconciliados con nuestros límites, sabiendo que vivier en las manos de Dios, nuestra debilidad se convierte en posibilidad, en trampolín a algo nuevo y mejor.
¡¡¡Y si hoy empezamos a ver la debilidad como posiblidad y no como limitación!!!
Mirando el corazón y no las apariencias…
¿Cómo miras tu vida y la de los demás?
¿Miras las apariencias o miras el corazón?
¿Cómo te miran los demás?